Banco de Vizcaya contribuye al reflotamiento de bancos afectados por la crisis económica y desarrolla una política de fuerte crecimiento por adquisiciones, que le lleva a formar un gran grupo bancario. El proceso de integración recibe un fuerte impulso cuando, en enero de 2000, se adopta la marca única BBVA. El problema es que los vendedores que uno puede encontrarse por ahí no son precisamente entusiastas del NBA, sino personas que buscan vender y ya está.